RELEVO EN LA ALCALDÍA DE PAMPLONA. EL PSN NO FORMARÁ PARTE DEL EQUIPO DE GOBIERNO
La anunciada moción de censura contra la alcaldesa Ibarrola ha tenido lugar este jueves. De resultas de la misma ha sido investido Joseba Asiron como nuevo alcalde de Pamplona al obtener el apoyo de 15 de los 26 concejales presentes en el pleno. Como se explica en las anteriores entradas de este blog, la moción a Ibarrola trae consecuencia del acuerdo alcanzado entre el PSN y EH Bildu a raíz de la parálisis política e institucional que viene padeciendo Pamplona. El socialista Tomás Rodríguez Garraza ha renunciado finalmente a ser investido concejal por las presiones padecidas desde el entorno de la derecha. Será Miguel Matellanes quien en un próximo pleno se incorpore a nuestro grupo.
Durante el pleno de la moción, la alcaldesa saliente ha reiterado las gruesas descalificaciones contra nuestro partido y nuestro grupo municipal, en línea con la política de confrontación que la derecha viene practicando en contra de los gobiernos que no controla. Ni un ápice de autocrítica sobre la prepotencia, altanería, uso en beneficio propio partidista de los medios municipales y, sobre todo, su incapacidad para alcanzar cualquier mínimo consenso con quienes no piensan como ella -a pesar de contar únicamente con nueve concejales- y la parálisis en los grandes asuntos de ciudad. Para colmo, la ya ex alcaldesa ha rematado su posterior comparecencia ante los medios de comunicación con una frase que bien la define: "Nunca apoyaría a Bildu, pase lo que pase, prefiero fregar escaleras" (sic).
Nuestra portavoz, Marina Curiel, ha hecho esta contundente intervención:
"La política municipal, a menudo subestimada en comparación con otros asuntos de ámbito nacional, desempeña un papel crucial en la vida cotidiana de los ciudadanos y ciudadanas. En este contexto, la verdadera esencia de una política municipal efectiva y representativa radica en la capacidad de los líderes locales para escuchar. Escuchar de manera activa y reflexiva, como un pilar fundamental para la toma de decisiones. En la escucha se forjan los cimientos de una gestión municipal, de una democracia local vibrante y participativa.
Cristina Ibarrola, lejos de mejorar la gestión de su antecesor, Enrique Maya, ha estado llevando a cabo una acción política prepotente, unilateral, opaca y totalmente ajena a la escucha y al diálogo. Menospreciando continuamente al resto de fuerzas políticas a pesar de estar en minoría. Nunca ha querido llegar a acuerdos, impidiendo el avance de la ciudad. Ha sido incapaz de aprobar presupuestos. Presentar un folio en blanco es un ejercicio de irresponsabilidad, demostrando que no tiene proyecto de ciudad.
Hemos visto a muchos políticos morir de éxito. Políticos con acelerados crecimientos, con apariencia de poder conseguir grandes cosas pero que al final terminan quebrando y desapareciendo en poco tiempo. La Sra. Ibarrola va a ostentar el título de ser la primera alcaldesa en democracia dentro de la historia de Pamplona a la que le hacen una moción de censura. En democracia, la moción de censura emerge como una herramienta vital para la rendición de cuentas y la preservación de la integridad democrática. Esta moción de censura se circunscribe a Pamplona y está respaldada por la ineficacia de la gestión del equipo de gobierno de UPN, liderado por la alcaldesa Ibarrola.
Sra. Ibarrola, ningún poder es absoluto ni inmune al escrutinio ciudadano. El PSN de Pamplona ha demostrado que UPN no es imprescindible en el Ayuntamiento de Pamplona. Un Ayuntamiento que han considerado suyo y no de los pamploneses y pamplonesas El Partido Socialista de Pamplona ha apoyado esta moción de censura porque se sostiene con un acuerdo político, un hito importante. Un acuerdo integrado por principios éticos y valores democráticos, así como proyectos para hacer ciudad.
El PSOE está abriendo un importante camino para hacer una política responsable, capaz de cambiar las cosas. El acuerdo, firmado con EH Bildu para sacar adelante la moción de censura en el Ayuntamiento de Pamplona, es transparente y tiene unos cimientos claros. Se respetará la realidad sociolingüística de Pamplona, se respetará la Ley de Símbolos, habrá un plan de convivencia, se despolitizarán los sanfermines, se respetará la mayoría del pleno cuando no haya acuerdo y estará presente la convicción política y ética de que es necesario el reconocimiento y reparación de las víctimas generadas por la violencia de ETA.
No se trata de un acuerdo de gobierno, no vamos a entrar en el gobierno municipal, es un acuerdo político porque ha llegado el momento de que Pamplona viva un tiempo nuevo. Es necesario que después de tanta mentira y tanto engaño por parte de UPN, Pamplona respire y mire hacia adelante. UPN nos está señalando, nos está insultando, nos están poniendo en el foco. Frente a los insultos, en el PSN trabajamos con responsabilidad política y responsabilidad institucional, además de valentía, porque trabajando se demuestran las cosas y se demuestra el camino. Escoria, traición, infamia, miserables, indignos y despreciables. No todo vale en el discurso o en la crítica política, la palabra es esencial en democracia y el insulto fácil hace perder la razón de la palabra y el valor que tiene para dialogar o para buscar acuerdos.
Ustedes han demostrados una clase política de baja calidad, ignorante y sectaria, sin ideas propias, que en los últimos días ha utilizado el espacio público de todos los pamploneses y pamplonesas, como son las calles de nuestra ciudad, para confrontar, para crear mal ambiente, para insultar, para señalar. El Partido Socialista de Pamplona tiene un papel protagonista, impulsor, facilitador de este nuevo tiempo, sobre las bases acordadas. Nuestro papel estará muy presente desde una oposición responsable y rigurosa, seremos la fuerza motriz de los cambios significativos que transformarán Pamplona. Tenemos un compromiso con el futuro de esta ciudad. Por Pamplona, por Iruña, por sus ciudadanos y ciudadanas".
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