Una vez más, nos encontramos a las puertas de la Navidad, tiempo de encuentros y ausencias, de balances y previsiones, de acercamiento humano, y de recuerdos que deben dirigirse también hacia quienes, por diversas causas, no pueden disfrutar en plenitud estas fiestas.
Esta vez más que nunca, nuestro deseo es el de que 2011 sea un año mejor que el presente. En esa confianza, os deseamos unas felices fiestas y un próspero año nuevo.