El empeño de nuestro Grupo Municipal para que Pamplona sea una ciudad con "Tolerancia cero" hacia el terrorismo ha caído en saco roto. Hoy es el día en que el grupo municipal que ostenta la alcaldía sigue sin siquiera condenar a ETA. Geroa Bai e IE callan y consienten, mientras Aranzadi va más allá y se niega sistemáticamente a condenar cualquier ataque terrorista.
En este contexto, Asiron no duda en financiar eventos "populares" que se han convertido en espacios de impunidad y exclusión para reivindicar y homenajear a los presos de ETA entre pancartas y símbolos identitarios ajenos a Navarra. Buen ejemplo de ello lo tenemos, una vez más, en las próximas fiestas de San Fermín Chiquito. Lejos de adoptar medidas para evitar tropelías pasadas (ver entrada blog de hace un año) el equipo de gobierno apoya y financia un programa de fiestas en el que se incluye publicidad en favor de los presos etarras y otras reivindicaciones políticas radicales, como muestran las fotografías.
Ni las víctimas, ni la inmensa mayoría de la ciudadanía pamplonesa merecen esta nueva afrenta de Asiron.
(Foto Navarra.com)