En unos momentos en que la incertidumbre parece adueñarse en tantos ámbitos, conviene poner en valor ese principio de solidaridad que pasa por ocuparse desinteresadamente de las personas o causas ajenas, difíciles o comprometidas.
Frente a tanta actitud egoísta, localista y populista, nuestro compromiso se hace más necesario que nunca.
En esa confianza os deseamos ¡FELIZ NAVIDAD Y PRÓSPERO AÑO NUEVO!