A la incredulidad y estupefacción causada en un primer momento por Vladimir Putin al invadir militarmente Ucrania, se han unido toda una serie de reacciones en cascada. Sorprende, en primer lugar, la resistencia militar que están mostrando la milicia y la población ucraniana frente a la invasión. Además, y en contra de lo que cabía presumir, Europa ha dado una respuesta tan unitaria como contundente, tanto en el plano social como en el político y económico, con graves sanciones hacia el régimen autócrata y oligárquico de Putin, a las que se ha unido Estados Unidos, y en solidaridad y apoyo hacia Ucrania y su legítimo gobierno. En España, Pedro Sánchez ha condenado con contundencia la invasión y ha resaltado la importancia de la respuesta dada, abogando por el consenso también en el ámbito nacional y alertando de las consecuencias que todo ello va a ocasionar.
A destacar el fuerte apoyo y solidaridad que el pueblo ucraniano está encontrando por parte de las instituciones y la sociedad, a lo que Navarra y Pamplona no son ajenas. Ayer mismo se produjeron sendas concentraciones frente al Ayuntamiento y en el paseo de Sarasate con la presencia de las máximas autoridades navarras, a las que acudió nuestro grupo municipal con Maite Esporrín a la cabeza.